Golpe a golpe, verso a verso
Matones a las órdenes de la intendencia, algunos de ellos encapuchados y armados con palos, agredieron a un grupo de vecinos que se manifestaban frente a la sede municipal.
En medio de la refriega se generó una pedrada que provocó roturas en el frente vidriado del edificio. En sus declaraciones a medios nacionales, el intendente de Hurlingham mintió diciendo que se había tratado de un ataque a la sede municipal, por el que responsabilizó a las organizaciones kirchneristas del distrito. Imágenes tomadas por los mismos vecinos dejan en claro que tal ataque no existió y que los disturbios fueron provocados por la propia municipalidad.
¿Es posible que un intendente mande a golpear a mujeres y niños? La respuesta está en las fotos y en los videos.
Leé la nota en la edición online de El Espejo, de Hurlingham: http://www.espejonet.com.ar/diario/2013071/
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